miércoles, 29 de febrero de 2012

Avanza la crisis frigorífica en Argentina



La dura situación que atraviesan los frigoríficos alcanzó también a Cresud, una de las mayores agropecuarias del país, propiedad del grupo IRSA. Para no cerrar, su empresa Carnes Pampeanas (CP), el principal establecimiento de esa provincia, les propuso a los 245 trabajadores dejar de cobrar por cuatro meses la llamada garantía horaria (que es de $ 3.100) y aceptar una rebaja salarial del 40% . Recibirían $ 2.400 mensuales, incluida una ayuda oficial de $ 800.
El frigorífico, que puede procesar 9.500 cabezas mensuales, hace dos meses que no faena . El director de CP, Gastón Lernoud, explicó que el acuerdo propuesto “es un esfuerzo para mantener la planta abierta ”. La sequía, la caída del stock ganadero, el costo del kilo vivo y la baja del precio de la cuota Hilton fue el combo que llevó a la crisis actual.
La propuesta de rebaja salarial, a pesar de que fue firmada por el Sindicato de la Carne, ahora debe ser rubricada por la mayoría simple de los 245 trabajadores. Hace un año, Carnes Pampeanas tenía 440 empleados. Pero la empresa eliminó un turno de faena y despidió a 200 operarios.
Los directivos informaron además que la estadounidense Tyson Foods, la mayor productora de carne procesada del mundo, que era socia en la empresa, vendió su parte a Cresud. “El 26 de diciembre de 2011 se efectivizó la venta. Era una decisión que venía de principios de año”, detalló el gerente, Hernán Obarrio.
La crisis de la industria ya hizo que la norteamerican Swift cerrara su planta de Venado Tuerto, mientras que esta semana ex operarios del frigorífico Villa Olga, de Bahía Blanca, tomaron la planta.
La planta de Carnes Pampeanas cumplía con las normas para exportar a Europa. “El valor de venta de la Cuota Hilton cayó un 30%”, dijo Lernoud. “Somos una planta preparada para exportar. Los costos de un frigorífico para consumo, a diferencia del exportador, son menores”, agregó Obarrio.

Publicado por Clarín el 28 de febrero 2012